Hacer de lo cotidiano una poesía
para hacer -y continuar- la
vida cotidiana de la poesía.
¿Me verán el alma?
¿Sabrán los secretos que esconde
mi corazón?
¿Conocerán el enigma de
mi destino?
y al saberlo ¿me matarán?
No.
Muy desesperanzador
el informe.
No pudieron ver nada
de eso.
Todo normal.
Again
Hoy después de siete años el alma sigue en mi cuerpo o en mi cuero
que es solo su envoltorio y debo entrar de nuevo en esa máquina
que lo ve todo despedazándolo en imágenes.
No temo
y ya no espero que descubran nada.
Comentarios